De interior suave y esponjoso, los scones uno de los grandes favoritos para la hora del té.
– Porciones: 10
– Tiempo de preparación: 20 minutos
– Tiempo de cocción: 12 minutos
Los scones son tan fáciles de hacer que no hace falta amasarlos, sino simplemente unir la masa con las manos. Se sirven con mermelada o queso blanco. Pueden ser dulces o salados, dependiendo de los ingredientes añadidos.
INGREDIENTES
– 500 gr. de harina
– 150 gr. de manteca fría
– 1 cucharadita de polvo de hornear
– 100 gr. de azúcar
– Pizca de sal
– 2 huevos y 1 para pintar
– 1 taza de leche fría
PREPARACIÓN
PASO 1
Formar un arenado con la manteca fría, la harina, el polvo de hornear, la sal y el azúcar. Mezclar todo bien.
PASO 2
Hacer un hueco en el centro y poner dentro los huevos y la leche fría, de a poco, ya que no siempre se usa toda. Mezclar con una cuchara de madera hasta que estén bien unidos todos los ingredientes formando una masa que no sea blanda ni consistente.
PASO 3
Colocarla sobre la mesada y estirar de 2 centímetros de espesor.
PASO 4
Cortar los scones con un cortante liso chico.
PASO 5
Colocarlos en una placa enmantecada y pintarlos con huevo batido, solo la superficie. Hornear a temperatura media 12 minutos.
TIPS:
-Añadir una cucharadita de esencia de vainilla o ralladura de limón a la masa para un sabor más intenso.
-Para adaptar a distintas ocasiones, se pueden enriquecer con pasas, nueces, queso o hierbas.
Fuente: CLARÍN