Existen algunos espacios de la casa donde un módem de Internet puede ser más efectivo para distribuir la señal a cada rincón para que toda la familia pueda usarlo sin dificultades.
Las personas se volvieron cada día más dependientes de una buena señal de Wi-Fi. Internet sirve para trabajar, socializar y entretenerse, pero también para hacer trámites, sacar turnos y hasta para transferir dinero. El encargado de distribuir la señal del Internet a través del cable es el router: su funcionamiento óptimo y eficaz es fundamental para hacer miles de tareas cotidianas.
Pese a que muchos usuarios están acostumbrados a los “cortocircuitos” en la señal de la conexión Wi-Fi, varios de ellos terminan siendo vencidos por el cansancio y hasta creen que los problemas constantes pueden estar relacionados con la empresa que contrataron. Antes de llamar al servicio técnico de la compañía de la que se es usuario, pueden existir algunas formas de optimizar la señal sin conocimientos específicos. A continuación, los trucos para que haya Wi-Fi en todos los rincones de la casa y sin interferencias
LOS TRUCOS DEFINITIVOS PARA QUE HAYA WI-FI EN TODOS LOS RINCONES DE LA CASA Y SIN INTERFERENCIAS
Para tener buena señal en toda la casa es necesario seguir los consejos a continuación:
-El router debe estar ubicado en el centro de la casa, si es que esa locación es donde estarán conectados la mayor cantidad de dispositivos que necesitan Internet.
-Debido a que los routers expanden la señal Wi-Fi hacia abajo, debe estar colocado además en alguna posición alta.
-Las ventanas y paredes pueden complicar la llegada de la señal a los dispositivos, así que lo mejor es instalarlo lejos de estos objetos. Mientras que los ladrillos y piedras, espejos e incluso algunos electrodomésticos o los ascensores, también perjudican la calidad de la señal.
-Los routers Wi-Fi deben estar visibles y no dentro de armarios. Los elementos metálicos y el cristal no son materiales amigos para una buena conexión, porque provocan que la señal rebote.
-Evitar colocar el router Wi-Fi en el exterior, ya que el agua, los árboles o el sol pueden interferir de forma negativa en la conexión. En el caso de que se desee una buena conexión en un jardín o balcón, lo mejor es usar un repetidor.
Es recomendable evitar que aparatos viejos se conecten a la señal, porque podrían ralentizarla. Cada dispositivo conectado comparte y divide la velocidad que el módem puede entregar.
LA REGLA DE LOS 30 CENTÍMETROS
Un informe de Sky Broadband, una de las dos empresas mayoritarias que ofrecen este servicio en el Reino Unido, determinó que nueve de cada 10 problemas que presenta la señal de Wi-Fi se relacionan con el lugar donde se encuentra colocado el router dentro de la casa. La cifra fue publicada por el periódico británico The Sun en julio del año pasado y precisamente de allí surge la regla de los treinta centímetros.
“Para un mejor rendimiento de la señal de Wi-Fi se debe colocar el router al menos a 30 centímetros de otros dispositivos electrónicos como parlantes, computadoras y televisores, entre otros”, precisó a The Sun Aman Bhatti, experto en conectividad y uno de los directores de Sky Broadband.
Para asegurarnos que la señal se distribuya de la forma más equilibrada posible en el hogar, el especialista de la empresa británica explicó la razón de esta regla: “Cuando tienes un aparato electrónico conectado junto al router, este dispositivo copará la intensidad de la señal. Al monopolizarla, provocará que se distribuya de una manera menos uniforme y peor, lo que terminará afectando la velocidad del resto de los dispositivos”. Incluso, hay artefactos, como los televisores inteligentes, que deben colocarse a una distancia mínima de un metro y medio.
Fuente: LA NACIÓN